publicado el 4 de agosto de 2011
Marta Torres | Francis Ford Coppola llenó el pabellón H del Centro de Convenciones de San Diego donde se celebra la Comic-Con de centenares de fans con una máscara de Edgar Allan Poe (que en realidad ocultaba unas gafas 3D). El objetivo era mostrar su el tráiler de su última película: Twixt. Un filme autoproducido por el propio director, con un presupuesto reducido y una apariencia tan alejada de los estándares de Hollywood como del cine indie americano. Lo que la convierte, de entrada, en un producto interesante sea cual sea el resultado. Para empezar, la proyección del tráiler ya fue algo experimental. El director apareció en escena con un ipad con clips de la película y los mezcló en directo en función de la reacción del público, mientras un músico se encargaba del audio en directo. A pesar de algunos errores (era un ensayo), los asistentes aplaudieron la iniciativa.
La película conservará parte de esta interacción con el público y, según Coppola, sufrirá variaciones en cada proyección, aunque el núcleo básico será el mismo. La historia está inspirada en Edgar Allan Poe, que le inspiró en sueños, dijo, aunque de entrada recuerda más a Stephen King, y cuenta la historia de un escritor en horas bajas (Val Kilmer) que acaba en un pueblo perdido investigando el asesinato de una chica (Ellen Fanning, la hermana pequeña de Dakota Fanning). El próximo destino de Twixt será el Festival de Toronto.